Los protagonistas principales de Lima 2019 tuvieron una grata experiencia en la Villa Panamericana y Parapanamericana. Los gestos de los atletas y para atletas peruanos, que estuvieron presentes en Villa El Salvador, eran de aprobación, tras participar en la prueba de funcionamiento de estas instalaciones en las que convivirán durante el desarrollo de los Juegos.
Los seleccionados del equipo masculino y femenino de Hockey sobre césped verificaron que los departamentos en los que descansarán, durante la competencia, están aptos en su totalidad. Los capitanes de ambas delegaciones están conformes con la amplitud de las habitaciones y los accesos correspondientes.
“Es una emoción increíble estar en esta Villa que será el hogar de todos los deportistas y Para deportistas de Lima 2019. Es una infraestructura espectacular que nos dará todas las comodidades para competir de la mejor manera. Y es, además, una fuente de orgullo y emoción para el Perú”, indicó el arquero y capitán Félix Maffereti.
Los varones integran el grupo B junto a México, Canadá y Estados Unidos, rival de su estreno el 30 de julio. Mientras que las damas debutan, un día antes, frente a Chile y completan con Estados Unidos y México. Todos los partidos serán en el estadio de Hockey del Polideportivo Villa María del Triunfo.
PARA ATLETAS SATISFECHOS
Aunque sin duda, el ensayo más emotivo en la Villa fue con los 22 Para atletas de cuatro disciplinas como Para taekwondo, Para natación, Para atletismo, Para powerlifting y Boccia. Nueve de ellos, asistieron en silla de ruedas y comprobaron la accesibilidad de las torres, así como la amplitud de los ambientes de cada departamento.
Emocionan las historias de superación de nuestros representantes. El caso de Javier Soto Fajardo, quien competirá en Boccia, es un claro ejemplo de perseverancia. Competirá en un deporte para personas con diversidad funcional, ante oponentes de diversas edades. Sus sueños se forjaron desde su niñez en San Juan de Lurigancho.
Javier, con 24 años, culminó su carrera de administración y negocios en San Marcos, pero ante la carencia de vacantes para sus prácticas profesionales se refugió en el deporte desde hace siete meses. Su discapacidad severa no fue un impedimento para ser uno de los mejores y, meses después, ganar una medalla de bronce en Argentina, junto a su compañero Dean Acosta, en un torneo abierto panamericano.
“Es una alegría inmensa conocer este lugar, en el cual conviviremos con los más grandes deportistas Parapanamericanos. Las habitaciones son muy cómodas y están adaptadas a nuestras necesidades. Tengo una ansiedad enorme de que ya comiencen los Juegos porque estoy orgulloso de representar al Perú”, indicó el para atleta nacional.