El Gerente de Operaciones de Lima 2019, Alberto Valenzuela, presentó los principales avances en la organización, en el marco del Seminario de Jefes de Misión de los Juegos Parapanamericanos, cuando faltan un poco más de seis meses para el inicio de la fiesta deportiva, programada para el 23 de agosto próximo.
Valenzuela destacó el legado que dejará la organización de los Juegos Lima 2019 en el país, principalmente en la sede de alojamiento, ubicada en pleno corazón del distrito de Villa El Salvador. “Lo más importante es el legado que quedará con una serie de obras accesibles. Uno de los más importantes es la Villa Panamericana y Parapanamericana, que es la primera edificación accesible en el Perú, con más de 300 departamentos accesibles, pasadizos amplios, ascensores preparados para sillas de rueda”, afirmó.
“Estos siete edificios son los primeros accesibles en el país y es una inversión del Estado. Nunca se había construido de esta manera. Es un gran avance. Los Juegos son un ejemplo de modernización del Estado. Estamos muy entusiasmados en recibir a las delegaciones y entregarles todas las facilidades para su participación en Lima 2019”, enfatizó Valenzuela.
“Estamos trabajando por tener unos Juegos inclusivos. Cambiando como país, ciudad y sociedad, para recibir la fiesta deportiva. El Perú estará en los ojos del mundo y por ello hay mucha gente involucrada en la organización”, señaló Valenzuela.
LA VILLA ACCESIBLE
La Villa cuenta con 1,096 departamentos, de los cuales 548 son de 70 m2, 212 de 73 m2 y 336 de 75 m2, habiendo sido habilitados estos últimos para personas con discapacidad. Cada edificio cuenta con cuatro ascensores, con capacidad para 18 personas y acceso a sillas de ruedas.
La Villa tiene pisos podotáctiles en las vías peatonales y la ciclovía, con el fin de facilitar el desplazamiento hacia las torres de alojamiento de los deportistas con discapacidad visual.
Además, se implementó de la señalética con sistema Braille ubicada en todos los pisos de las torres de la Villa Panamericana y Parapanamericana. Este “lenguaje universal”, alerta e informa respecto de la circulación y de las acciones a tomar en caso de algún evento que ponga en riesgo la integridad de las personas con discapacidad visual.
El referido sistema también se instaló en la botonera de los cuatro ascensores, distribuidos en dos ejes, en cada una de sus siete torres, con el fin de que puedan operar la cabina para su traslado al piso deseado.
Cabe señalar que estos edificios cuentan, asimismo, con amplios pasadizos interiores y ascensores para facilitar el tránsito de personas con discapacidad motriz, quienes tienen que movilizarse en silla de ruedas.